Paella sin azafrán, croquetas de jamón sin jamón o migas manchegas con pan negro. Todo aliñado con el aceite de oliva justo, que fuera de nuestras fronteras se gana a pulso  el sobrenombre de “oro líquido”. Intentar cocinar como  en casa es un reto al que nos enfrentamos a diario algunos de los que vivimos fuera.

Más difícil todavía es tratar de difundir la cocina española entre nuestros amigos locales cuando no contamos con los ingredientes ni los instrumentos para cocinar esos platos que tanto echamos de menos. Pero no existen problemas, sino soluciones. Por eso Neftalí Peral, Rafael Calvo, Miguel Villalosada y Eneko Bolumburu, cuatro españoles afincados desde hace tiempo en Tallín, decidieron reunirse para pensar como acercar un poco más nuestra cocina a los estonios.  ¿El resultado? La publicación del libro Hispaania söögid Eesti köögis, o lo que es lo mismo: La comida española en la cocina estonia. Mari Laan, de origen estonio y licenciada en filología hispánica, se encargó de redactar los textos en el idioma ugrofinés.

“Se nos ocurrió la idea de escribir este libro porque aquí nuestra cocina gusta, pero la mayoría de publicaciones que se venden en las librerías son traducciones de libros españoles y gran parte  de los ingredientes aquí no se encuentran o son muy caros”. – dice Neftalí Peral, uno de los co-autores del libro: “Lo que hicimos fue recopilar los platos que cocinamos para nosotros mismos. Vamos al mercado y con los productos que encontramos hacemos platos españoles. No usamos ningún ingrediente que sea difícil de encontrar aquí”.

Por eso en el libro no hay platos con pescado azul, como sardinas o boquerones. En las recetas con jamón, los autores usan el jamón del que se vende en Estonia – más parecido al prosciutto di Parma italiano, que a nuestro jamón serrano. Además, los platos que recoge el libro, son bastante sencillos de preparar: “No es un manual para cocineros profesionales, lo que pretendemos con esta publicación es acercar un poco más España a los estonios” – apunta Neftalí.

La publicación ya se encuentra en las bibliotecas y librerías del país báltico.  Las tradicionales torrijas de semana santa o la popular tortilla de patatas probablemente ahora en los fogones de algún local decidido a probar, haciendo honor al título del libro, la comida española en la cocina estonia.