Entrevistamos a Paul Viejo, poeta, escritor y traductor que este mes de noviembre será protagonista de dos grandes eventos organizados por el Instituto Cervantes de Milán: la conferencia “Incontro con Paul Viejo” y el club de lectura “Gli assorti (Los ensimismados)”, libro que escribió durante su estancia en la ciudad. Si estás pensando pasar una temporada en Milán no te pierdas lo que Paul Viejo tiene que decir sobre la capital lombarda. 

CEXT- ¿Cómo fueron tus comienzos en la literatura? 

Paul- Mis comienzos fueron los de un lector voraz que quería seguir leyendo. Y de tanto leer empecé a imitar, y de tanto imitar empecé a querer hacer algo mío. Tontos poemas adolescentes, primero; un proyecto narrativo más meditado después, que en el fondo es querer seguir imitando lo que leía cuando era un lector furioso.

CEXT- ¿Qué te trajo a Milán? 

Paul- El amor. La Rubia. Un proyecto de amor con la Rubia que, además, me permitiría a mí tener tiempo y espacio y aprender una lengua de la que no conocía ninguna palabra, o si la conocía no sabía pronunciarla. Eso es lo que me trajo. Lo que me llevé es un idioma y la literatura italiana, es decir, una de las más interesantes en este momento en Europa.

CEXT- En la época que viviste en Milán escribiste “Los ensimismados”, ¿cómo te inspiró esta cuidad a la hora de escribirla? 

Paul- “Los ensimismados” lleva como subtítulo Una autobiografía confusa, así que es lógico que haya parte de Milán en sus cuentos más o menos explícito. Sobre todo en uno, “Derrapar”, Milán, sus calles e incluso su periferia está explícito en la narración. 

CEXT- ¿Cuál es el recuerdo más bonito que guardas del período que viviste aquí? 

Paul- Muchos, y mucha gente. Pero sobre todo recuerdo las mañana de los sábados en las que iba a la casa del poeta Milo de Angelis para trabajar, mano a mano, en la traducción de los poemas de “Tema del addio”.

CEXT- ¿Qué consejo le darías a las personas que viven en Milán o que están pensando venir a vivir a la capital Lombarda? 

Paul- Que tengan paciencia con el clima cruel e inclemente del invierno, y que tengan paciencia con el clima cruel e inclemente del verano.

CEXT- ¿Qué sientes al pasar otra vez por las calles milanesas?, ¿vienes a menudo? 

Paul- Emoción. Vine aquí con veintitantos años y me fui cerca de los cuarenta. Así que, aunque no haya llegado a sentirme “de la ciudad”, sí he vivido en ella una parte demasiado importante de mi vida.

CEXT- ¿Qué es lo que más te gusta de Milán? ¿Y lo que menos?

Paul- Lo que más me gusta son esos patios secretos que hay en el interior de los edificios que uno no puede ni sospechar que existen. 

Y lo que menos, el interior de los edificios a los que a veces cuesta tanto que te inviten, que te integren. La frialdad a veces de Milán y los milaneses.

CEXT- ¿A qué lugar de Milán volverás en este viaje sin lugar a duda?

Paul- Sin lugar a dudas iré corriendo a la Vila Simonetta, la actual sede de la escuela cívica de música, un palacio del siglo XV que tiene una inscripción sobre el eco que me apasiona, y sobre todo que es en parte de responsable de que yo fuera a Milán por primera vez.

IMAGEN: @fundacionagala

Una entrevista de Lydia Zapata para CEXT