Un momento...
15/09/2020
¿De qué se suele quejar un empresario tradicional?
Dificultades para conseguir financiación y para amortizar una inversión elevada, costes fijos asfixiantes, gestión del personal complicada, desgaste por cobros a deudores, escasez de tiempo libre, competencia feroz, márgenes a la baja… y un largo etcétera.
Para empeorarlo todo, solo faltaba el COVID-19.
¿Sería interesante si existiera una oportunidad de negocio que obviara todos estos inconvenientes y además pudiera desarrollarse sin necsidad de salir de casa?
Hace unas décadas empezaron a generalizarse las franquicias a pie de calle.
Hoy está emergiendo la revolución de las master franquicias por internet llave en mano.
¿Y si además se pudieran ofrecer los servicios esenciales, que todo el mundo ustiliza y a los que nadie quiere renunciar, ofreciendo ahorros considerables?
Todavia hay más ventajas: demanda en aumento, sencilla fidelización, ingresos residuales crecientes mes a mes, gestión 100 % online…
Generar ingresos desde la comodidad de tu hogar ha dejado de ser una quimera.