El pasado sábado 11 de mayo, el Estadio Nuevo los Cármenes de Granada acogía la final de la Copa de la Reina de fútbol disputada entre la Real Sociedad y el Atlético de Madrid ante 17.550 espectadores.

Era la cuarta final consecutiva del equipo colchonero, que acababa de proclamarse campeón de Liga en casa de la Real, con solo dos derrotas en todo el campeonato. El Atleti, que partía como favorito, buscaba su segunda copa después de haberla logrado en 2016, y la Real disputaba su primera final.

El equipo madrileño abría el marcador en el minuto 16 y la Real conseguía el empate tan solo tres minutos después. Contra todo pronóstico, el conjunto vasco marcaba el segundo tanto en el minuto 60, que daba la vuelta al marcador y les permitía ponerse por delante. Con este gol conseguían la victoria y se proclamaban campeonas.

Pero el partido pasará a la historia, no solo por la victoria de la Real, sino por ser la primera vez, desde 1983, que una monarca asistía al encuentro. Doña Letizia presidía el evento y entregaba la copa a la capitana de la Real Sociedad, Sandra Ramajo.

El partido fue emitido por Telecinco y logró una media de audiencia superior al millón y medio de espectadores. Esta final, sin duda, es un ejemplo de la popularidad que está logrando el fútbol femenino en los últimos meses. Muy lejos aún del masculino, las jugadoras consiguen ser noticia y dar visibilidad a la mujer en el mundo del deporte.

IMAGEN: El País

Un artículo de Beatriz Calvo para CEXT