La biblioteca Morningside de Edimburgo acoge la exposición “Radical Feelings” de la artista mallorquina Marian Haro hasta el 29 de agosto (Todos los cuadros están a la venta) Además de pintora e ilustradora, esta española afincada en la capital escocesa desde 2011, es antropóloga y educadora social especializada en género. Tres años de paciencia, decenas de currículums y un continuo aprendizaje sobre como funcionan las solicitudes y las relaciones de trabajo en Escocia, tuvieron su recompensa y actualmente trabaja para Women’s Aid como educadora social para mujeres. Su objetivo se había cumplido parcialmente, ya que desde que llegó a Edimburgo no había hecho nada relacionado con el arte. Hace un año decidió rellenar ese hueco en su vida y reservó la sala de exposiciones de la biblioteca con el fin de mostrar su trabajo en su nuevo país de acogida. El resultado ha sido “Radical Feelings”, una exhibición cuyas obras reflejan sentimientos y exploran a la mujer en todas sus dimensiones. CEXT se acercó a la muestra para charlar con su autora sobre arte, emociones y como cambia la visión del mundo y de las cosas cuando uno se pasa al lado del inmigrante.

CEXT – ¿Por qué “Radical Feelings”?

Marian Haro – Tenía que buscar un hilo conductor para todas las obras, que por otra parte son muy diversas. Lo único que las unía a todas eran las emociones. Emociones que en mi opinión tienen que ser radicales, sino, no valen. Las emociones tienen que ser un poco extremas, sino es aburrido, unas emociones tibias no… Luego que consiga despertar los mismos sentimientos en el espectador es otra cosa. Pero yo, cuando hice estos cuadros experimenté emociones fuertes.

CEXT – Además de artista eres antropóloga social, ¿tus obras reflejan también esa parte de ti? ¿Son también un estudio de las sociedades, las personas y sus culturas?

M.H – La verdad es que no. Lo que quizás tenga más que ver con la antropología es la lado feminista de mis obras, que eso también se refleja. En cualquier caso esta exhibición no parte de la diversidad cultural. Tuve una fase así, pero ahora ya no. Esta exposición habla más de mujeres.

CEXT – Sí, me he dado cuenta que la mujer, el nacimiento y el concepto de belleza asociado a la mujer son temas recurrentes en tu obra…

M.H. – Es mi tema, es lo que más me preocupa e interesa. Y luego sin querer me salen más mujeres. Hablo de mujeres, de cómo se sienten, cómo viven e interactúan. Pienso que las emociones son algo más relacionado con las mujeres, la intensidad…

CEXT – ¿Podríamos decir entonces que es una exposición feminista?

M.H – No creo que sea una exposición política, tiene más de personal que de político. Aunque al final también es verdad que lo político es personal….

CEXT – ¿Tus obras reflejan entonces tu estado emocional y tus sentimientos en el momento de hacerlas?

M.H – Sí, todas o casi todas. Para mi más que un esfuerzo mental, es un esfuerzo emocional. A veces es muy personal lo que reflejas en tus cuadros.

CEXT – Digamos que entonces no te importa “desnudarte” ante el espectador…

M.H. – Si que me importa, pero lo necesito. A mi me da mucha vergüenza que vean mis cuadros y me siento vulnerable. Porque cuando muestras tus obras te expones a que la gente opine y te critique. Cuando estás en tu casa y haces tu obra o escribes, desde la soledad, eres muy valiente… pero luego ponlo ahí fuera y que la gente opine… Yo personalmente utilizo un poco el humor para protegerme de todo eso.

CEXT – ¿Qué te ha inspirado para hacer esta obra? ¿Tienes la influencia de algún artista en concreto?

M.H. – Si me gusta mucho Frida Kahlo y las mujeres que pintan y hablan de si mismas. Porque yo creo que hay que ser valiente. Pintar un paisaje también puede ser muy emocional, pero para hablar de tus propios sentimientos, de tus experiencias, hay que ser valiente y Frida, por ejemplo, lo era. Obviamente no me comparo con ella, pero me gusta reflejar emociones y sentimientos en mis obras.

CEXT – ¿Cómo reacciona la gente ante tu arte?

M.H. – Esta es la exposición más positiva que he hecho, quizás por el estado de ánimo en el que me encuentro. Pero siempre me ha dado mucha rabia que me dijeran que soy muy oscura. Me solían decir “si haces a alguien feliz y riendo te van a comprar el cuadro, pero así, no lo vas a vender nunca”. Porque parte de mi obra es dura, grotesca, macabra… yo tenía un profesor que me decía “eso es muy grotesco Marian, tiene que ser bonito porque si quieres ganarte la vida con la ilustración tienes que hacer algo bonito”. Pero a mi me aburre el “happy, happy”, me interesa que la gente piense y remover conciencias. Las cosas negativas son las cosas que más vergüenza nos dan y a veces son también las más profundas… la gente a la que todo le ha ido bien, que nunca ha tenido ningún problema, a veces es un poquito aburrida…me gusta más la gente que ha sufrido y que tiene algo que contar.

CEXT – ¿Sobre qué quieres que tus espectadores reflexionen cuando ven tus obras?

M.H. – Sobre bastantes cosas, es un poco difícil responder una sola. Explorar las emociones es algo que me interesa mucho y luego yo tengo la teoría, bueno la tiene otra gente también, de que la civilización se ha basado en el sufrimiento de las mujeres toda la vida. Sino hubiese sido porque las mujeres hemos sufrido todo el rato y hemos tenido que luchar continuamente por nuestros derechos muchas cosas no hubieran cambiado. Aunque las cosas van cambiando poco a poco, no lo hacen lo suficientemente rápido. Además, el sufrimiento de las mujeres se oculta, se normaliza o se deja en un segundo plano. Cuando se habla por ejemplo del maltrato, es como, bueno ha estado ahí toda la vida, y se normaliza. Entonces yo creo que es importante y quiero reflejar en mi obra que eso está ahí.

CEXT – Ahora eres inmigrante, ¿ha cambiado esto tu visión del mundo y por lo tanto tu obra?

M.H. – Sí, yo pienso que sí. En los últimos años en España yo ocupaba el puesto de mediadora intercultural para el Ayuntamiento de Palma y trabajaba, además de con grupos de mujeres, con inmigrantes y gentes de otras culturas y países. Yo era la única mallorquina. Todos eran de Senegal, Alemania, Bulgaria, Marruecos, Argentina… y algunas veces me decían, “Marian no, tu no hables porque no eres inmigrante y no lo puedes entender”, y eso me encendía y pensé que me gustaría experimentar eso. El venirme aquí ha hecho que ahora les entienda mucho mejor. Cuando eres inmigrante el mundo se hace también mas grande y ves que hay mucha mas diversidad, mas cosas que hacer y que se premia a los valientes. Mi autoimagen también ha cambiado. Me veo mucho mas aventurera de lo que me veía en Mallorca. Me veo capaz, y si las cosas no me van bien pues pienso que lo podré volver a intentar y podré irme a otro sitio. Y me he vuelto mucho más humilde. En Mallorca pensaba que ya lo tenía todo hecho, que no tenía que aprender nada más en la vida. Entonces llegas aquí y tienes que aprender casi hasta a caminar de nuevo.

CEXT – Como artista e ilustradora ¿Qué diferencias ves con respecto a España?

M.H. – Hay un par de cosas. En España, al menos en Mallorca y creo que en España en general, somos más visuales, hacemos más arte visual. Hay muchísimo más, o quizás es que aquí no lo he explorado demasiado. A nivel musical aquí. Aquí hay más conciertos, mas música en vivo. En España mucha gente pinta o hace fotografía… Y luego que yo creo que lo tienen más fácil aquí, tienen más recursos y están mucho más abiertos a la comunidad, a que los vecinos participen, hagan exposiciones, etc. Para conseguir una sala como yo he hecho aquí en la biblioteca de Morningside, en España hay que lucharlo más, hay que justificarlo más y te ponen muchas más trabas. No existe la visión de que hay que potenciar la participación. En España es más como que te hacen un favor y aquí es como que tu estás contribuyendo al barrio y a la comunidad.

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Exposición «Radical Feelings» de Marian Haro Lugar: Morningside Library (room 1); 184-186 Morningside Road, EH10 4PU, Edinburgh. Hora: Lunes a Miércoles (10am – 8pm); Jueves a Sábado (10am – 5pm) Precio: GRATIS Para más información puedes visitar la página web de la artista.

Foto cedida por Marian Haro

Un entrevista de Noelia Martínez Castellanos para CEXT