Cultura

Montevideo (Uruguay)

REPORTAJE: El Centro Gallego de Montevideo, pionero en difundir la cultura gallega

21/01/2019

En la ciudad de Montevideo, capital de la República Oriental del Uruguay, se encuentra la sede del Centro Gallego de Montevideo, pionero en el mundo de la difusión de la cultura gallega. Este club se construyó a finales del siglo XIX, cuando Uruguay dejaba de ser tierra de caudillos, gauchos y ganado. En esa época, el puerto de Montevideo, seductor y poderoso, era testigo de la llegada de un gran número de inmigrantes gallegos, colmados de sueños y esperanzas.

El 30 de agosto de 1879 se fundaba en la capital uruguaya el primer Centro Gallego de la diáspora que, al principio, estaba situado en una casa de la céntrica calle Paraguay. Tras cuatro décadas en las que todos los socios se volcaron en recaudar fondos, lograron adquirir el terreno para construir la actual sede de la calle San José, considerada patrimonio histórico gallego y también arquitectónico uruguayo por ser la primera construcción en el país diseñada para el funcionamiento de un club social.

El Centro Gallego de Montevideo es el más antiguo del mundo entre sus iguales. Fue fundado por iniciativa de Francisco Vázquez y los hermanos Benigno y Tomás Salgado. Los fundadores se reunieron en la casa de José María Quintana para designar la Comisión Organizadora y la primera Junta Directiva, presidida por el abogado Antonio Varela Stolle, nacido en Compostela en 1821 y doctorado en Jurisprudencia por la Universidad de Santiago. En la sala de lectura, situada en la planta baja, se encuadra un centenario pergamino que conmemora los nombres de los creadores de la institución.

El edificio social, comenzó a construirse en 1923 a partir del proyecto del arquitecto uruguayo de origen coruñés, Alfredo Campos. Fue declarado Monumento Histórico Nacional el 30 de enero de 2004, por tratarse de un magnífico ejemplo de arquitectura historicista ligada a la tradición estética española, concebido como «un espacio para recordar, practicar, compartir y difundir las costumbres y tradiciones gallegas».

El gerente administrativo de la institución se llama Daniel Cherro Núñez y es nieto de gallegos. Trabaja desde hace 28 años en la administración de la sede que actualmente tiene alrededor de 1.000 socios. El día del patrimonio, que se celebra en Uruguay, Daniel se encarga de realizar visitas guiadas por el edificio, mientras les cuenta a los visitantes un poco de su historia. «Han venido alcaldes de distintas regiones de España, diputados del parlamento gallego y del parlamento europeo, así como autoridades diplomáticas, como el consejero laboral», explica Daniel a CEXT.

Distribuidas en tres plantas, se encuentran varias salas dedicadas a personalidades, como por ejemplo la Sala de Honor a Rosalía de Castro, la Sala Ramón del Valle Inclán, la Biblioteca Concepción Arenal y la Sala de Lectura Catelao. En ella, se encuentra el busto en honor al escritor Alfonso Rodríguez Castelao. Los azulejos que adornan sus paredes, así como las baldosas que engalanan los pisos de toda la planta baja, tienen diseños que representan a Castilla León, torres y Galicia. Estos azulejos fueron traídos desde España para adornar y marcar la «presenza dun pouco da miña amada terra».

El Centro Gallego preserva un rico patrimonio que recoge bienes materiales e inmateriales a través de sus cuerpos artísticos: El Ballet Folklórico Alborada, la Escuela de Danzas, el Grupo Raigames, el Ballet España. Se celebra: el Día de las Letras Gallegas, la Festividad de Santiago Apóstol, el Homenaje a Castelao, el Día de Rosalía de Castro en Honor a la Mujer, y el Fin de Semana del Patrimonio que ofrece visitas guiadas.

En una sala del subsuelo funciona el Archivo Histórico del Centro Gallego, un registro de parte de la emigración en Uruguay, creado con apoyo del Consello da Cultura Galega.

Hace 50 años fue inaugurado el parque polideportivo. En el amplio espacio, de 28.000 metros cuadrados con piscina, se congrega toda la colectividad gallega, con especial énfasis en los jóvenes descendientes. Aquí se realizan actividades, como la fiesta de Fin de Año, la Queimada, la Romería de Otoño, que atrae a miles de personas que disfrutan de la música y danzas regionales, además de degustar platos típicos de la gastronomía gallega y española.

IMAGEN: Fuente propia.

Un reportaje de Graciela Bernini para CEXT

!Aviso de cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrar a los usuarios publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si se continúa navegando, consideramos que se acepta su uso. Es posible cambiar la configuración u obtener más información aquí