Uno de los edificios más espectaculares de entre las muchas bellezas arquitectónicas del Centro Histórico de la Ciudad de México es el Casino Español, el más antiguo de todos los centros sociales y el único sitio ideado específicamente para que los españoles tuvieran un lugar donde reunirse durante al menos cuarenta años.

El edificio que ocupa a día de hoy es su sexta sede (aunque las cinco anteriores estuvieron todas en edificios preciosos en el Centro Histórico), El Casino como sociedad se estableció en 1863 gracias a José Toriello Guerra, Manuel Mendoza Cortina, Cayetano Rubio, Isidoro de la Torre, Genaro Perogordo, Francisco Solís, Salvador de la Fuente y Niceto de Zamacois entre muchos otros personajes de la época, quienes desde sus inicios tuvieron intención de contar con un inmueble propio para el centro social.

En 1895 gracias a los socios del Casino, se adquirió el predio de la calle Espíritu Santo número 1½ (hoy Isabel la Católica 29), sitio donde se encontraba el Hospital del Espíritu Santo y Nuestra Señora de los Remedios. Tras su demolición, la construcción actual inició en 1903 y fue concluida en 1905; la edificación fue obra del arquitecto catalán Emilio González del Campo.

El edificio es una mezcla ecléctica de estilos ornamentales. Su fachada, patio y galerías tienen elementos barrocos, platerescos, renacentistas y árabes que logran armonía y majestuosidad. En la actualidad, el edificio cuenta con dos restaurantes especializados en cocina española y es también espacio de eventos sociales: actividades culturales, exposiciones, conferencias, presentaciones editoriales y conciertos. Además de editar la revista del Casino Español periódicamente y de ser el hogar de la Biblioteca Hispano Mexicana “Carlos Prieto”, en honor a quien donara un amplio acervo bibliográfico a esta sociedad que luego sería enriquecido por donaciones de la Embajada de España en México, de algunas comunidades españolas y de las Academias Mexicanas de la Lengua y de la Historia.

El Casino Español está abierto diariamente desde las 8 de la mañana y hasta las 18 horas.

Imágenes: cortesía del Casino Español

Un artículo de Gabriela Mosqueda para CEXT