Una de las cosas más curiosas de Estados Unidos es que la gente usa el coche para todo, a diferencia de España (o el resto de Europa, en general) donde el transporte público funciona muy bien. A menos que vivas en el centro de una gran metrópoli, es muy probable que necesites comprar un coche si vienes a vivir a los Estados Unidos. En este caso, necesitarías además obtener el carnet de conducir americano. Cada estado tiene sus propias regulaciones en cuanto a cómo y dónde obtenerlo. En este artículo te contamos cómo hacerlo en Illinois.

En el estado de Illinois, es la secretaría de estado (Illinois Secretary of State) quien se encarga de conceder estas licencias de conducción. Hay muchas oficinas de la secretaría del estado repartidas por todo el estado, y en su web oficial puedes encontrar la más cercana a tu domicilio. Una vez la hayas identificado, tendrás que presentar toda la documentación pertinente:

• Pasaporte
• Número de la seguridad social americano
• Documento I-94
• Visado o tarjeta de residencia
• Prueba de residencia en el estado de Illinois (por ejemplo, una factura domiciliada)
• Otros documentos de inmigración, en caso de que tu situación lo requiera

A continuación, para poder obtener el carnet es necesario pagar una tasa de 10$ y completar tres exámenes. El primero de ellos consiste en un simple test de visión para comprobar que no tienes ningún problema de vista que te impida ver bien en la carretera. El segundo de ellos es un examen teórico en el que tendrás que demostrar que estás familiarizado con las normas de conducción del estado de Illinois. Este examen se completa a ordenador y tiene preguntas de elección múltiple.

Si ya has conducido en España, no tendrás problema en completarlo, ya que se trata de preguntas muy básicas. En caso de que no tengas experiencia conduciendo anteriormente, puedes estudiarte dichas normas estudiando un folleto que te entregarán en la propia oficina. Por último, tendrás que realizar un test práctico de unos 20 minutos de duración en el que se te pedirá que hagas maniobras básicas como arrancar el coche, aparcar, o hacer algunos giros. De nuevo, este examen es también muy fácil si ya tienes experiencia previa conduciendo.

Si superas los tres exámenes, te sacarán una foto y te entregarán el carnet ese mismo día. En caso de suspender alguno de ellos, puedes presentarte de nuevo otro día siempre y cuando pagues la tasa obligatoria de 10$.

Algo muy importante a tener en cuenta es que tienes que llevar un coche al examen práctico de conducir. Lo normal en estos casos es que te acompañe un amigo o familiar que ya tenga carnet de conducir. Si no, en caso de que lo necesites, hay autoescuelas privadas que te prestan sus coches para realizar el examen a cambio de una tasa.

Un artículo de Irati Hurtado para CEXT