Un momento...
20/10/2018
Tanto si vives en Sudáfrica como si visitas el país, ir de safari supone una experiencia 100% genuina, en especial con estos consejos y pistas sobre el mejor de toda Sudáfrica. ¿Te atreves?
El Parque Nacional Kruger, en el noreste de Sudáfrica, no es uno de los lugares más famosos y turísticos del África subsahariana por casualidad. Con casi 20.000 hectáreas, este enclave natural de valor incalculable alberga, entre otros, a más del 60% de la población total de rinocerontes del mundo, a alrededor de 19.000 elefantes y 1.600 leones. Además, con suerte podrás ver guepardos en libertad desde tu coche.
El Parque Kruger se lleva la medalla al safari mejor organizado del mundo. Sus caminos cuidados, su oferta de alojamiento y áreas de descanso o su variedad de rutas bien señalizadas dan testimonio de que Sudáfrica es la nación más desarrollada de su región. Kruger es el lugar ideal para acercarse a la fauna salvaje africana por primera vez, más allá de los zoos y documentales de La 2.
En Kruger se pueden ver “los cinco grandes”: el león, el leopardo, el búfalo, el elefante y el rinoceronte. Tachar los cinco de tu lista de animales avistados, aunque es difícil, se convierte en la meta de todo buen safari. La experiencia tiene algo de videojuego real o juego de rol en el que vas encontrando el máximo de animales posibles, especialmente si compras a la entrada una de las guías con todas las especies e información práctica del parque (muy recomendable).
Si cuentas que “vas de safari”, no obstante, verás a los locales sonreír. Es una expresión típica de turista (los sudafricanos prefieren la fórmula game drive), pero aquí van algunos consejos prácticos para ser menos “novato”:
Un artículo de Nerea González para CEXT