Trabajar como taxista en la Gran Manzana es una buena opción para comenzar tu andadura profesional como autónomo aunque como habrás visto en las películas, es una ciudad llena de competencia pero muy demandante de este servicio. ¿Cómo puedes ejercer la profesión?

Como dato, te interesará saber que 1937 en las licencias de taxi costaban 137 dólares, es deicr, unos 98€ sin embargo en la actualidad las encontrarás por 500.000 de dólares. Mucho más barato que hace unos años, cuando costaban 1 millón, antes de la aparición de Uber, que hizo abaratar su precio.

Para conseguir la licencia del famoso taxi amarillo, sólo será necesario cumplir dos condiciones: tener más de 19 años y tener la tarjeta de seguridad social en regla.

Cuando la solicites deberás presentar un informe médico firmado por un doctor autorizado por la Comisión de Taxis y Limusinas (TLC). Se trata de unas pruebas médicas que garantizan el 100% de la seguridad del conductor, junto a un examen de drogas y la revisión del expediente de multas de tráfico. Todo ello supondrá un coste de 150 dólares.

Una vez presentados y aprobados estos documentos será necesario realizar un curso de conducción defensiva de aproximadamente 6 meses de duración, aprobados por el ayuntamiento de Nueva York. El precio de dichos cursos ronda los 300 dólares. El último paso es aprobar el examen de conducción de la academia y después un examen de inglés básico en caso de tratarse de personas no norteamericanas.

Si la idea no es conseguir la licencia de taxi y se quiere de limusina u otros servicios, ten en cuenta que algunos de los exámenes solicitados que tendrás que realizar son diferentes.

Este es un proceso caro, por eso eligen la opción de conseguir una licencia de Uber o Lyft. Dos plataformas de servicio de taxi más económicas que requieren un registro en la app para poder utilizarlas, convirtiéndose en un proceso totalmente diferente al tradicional.

Como conductor en alguna de estas plataformas, será necesario que te registres en la app, solicitar una entrevista en la sede central de la compañía y finalmente tras las pruebas de drogas y verificación de antecedentes, te convertirás en conductor.

Ambos servicios de desplazamiento conviven en la Gran Manzana para facilitar el desplazamiento y movilidad habitual a más de 10 millones de personas que residen en esta gran ciudad.

Un artículo de Miriam Martínez para Cext.