El día de San Patricio es una celebración cultural y religiosa celebrada el 17 de marzo, fecha tradicional de la muerte de San Patricio, el santo patrón más importante de Irlanda.

Este día se convirtió en un día oficial de fiesta cristiana a principios del siglo XVII y conmemora la llegada del cristianismo a Irlanda, y celebra el patrimonio y la cultura de los irlandeses en general. Las celebraciones generalmente incluyen desfiles públicos y festivales, y el uso de atuendos verdes o tréboles. Históricamente las restricciones de Cuaresma para comer y beber alcohol se levantaron durante este día, lo que ha alentado y propagado la tradición de consumo de alcohol de esta festividad.

Se dice que San Patricio usó el trébol, una planta de tres hojas, para explicar la Santísima Trinidad a los paganos irlandeses. Uno de los desfiles más largos y más grandes del día de San Patricio en América del Norte ocurre cada año en Montreal, cuya bandera de la ciudad incluye un trébol en su cuadrante inferior derecho. El desfile se ha celebrado anualmente sin interrupción desde 1824.

En la ciudad de Quebec, St-Patrick Parade regresó en 2010 después de más de 84 años de ausencia. Para la ocasión, una parte de la Orquesta del Departamento de Policía de Nueva York estuvieron presentes como invitados especiales.

Algunos grupos, especialmente Guinness, han presionado para hacer del Día de San Patricio una fiesta nacional.  En marzo de 2009, la Torre Calgary cambió sus luces exteriores superiores por nuevas bombillas CFL verdes justo a tiempo para el Día de San Patricio. Parte de una campaña ambiental de una organización sin fines de lucro (Proyecto Porchlight), el verde representa preocupaciones ambientales. Aproximadamente 210 luces se cambiaron a tiempo para el día de San Patricio, y se asemejaban a un sombrero de duende.

En Madrid durante algunos años consecutivos, se han iluminado de color verde monumentos tan importantes como La Puerta de Alcalá, la Cibeles o incluso el Palacio de Comunicaciones de Madrid. Incluso se celebra un festival desde hace varios años, el Festival St Patrick Day de Madrid, en el cual se recibe a todo el público amante del punkfolk y punkrock, la cerveza Guinness y el ambiente más irlandés.

En Barcelona, no podía ser menos. El Barrio Gótico acoge la celebración vistiendo de verde sus pubs. Solo exigen una cosa, ¡que lleves la cara pintada y algo verde! También se transmiten la esencia irlandesa a ciudades como Zaragoza que hace honor a la ocasión con las Jornadas de la Cultura Irlandesa, cine, música y literatura acompañada de un ambiente inmejorable.

En la costa este de la península, exactamente en Valencia y Alicante, también se convierte la festividad en color esmeralda. Valencia aprovecha la coincidencia con las Fallas para potenciar los conciertos en directo y la bajada de precios de las tascas y tabernas. En Alicante el desfile de Cabo Roig acoge a turistas y nativos para celebrar desde por la mañana con actividades y conciertos celtas, hasta acabar el día. En otras ciudades como Pontevedra, Bilbao, Logroño y muchas más la marea verde se extiende el 17 de marzo.

Definitivamente es una festividad especial, allá donde vayáis encontraréis tréboles, vestimenta verde y ambiente de fiesta. Es una buena excusa para celebrar y salir de fiesta con amigos y desconectar de la rutina diaria al menos por un día y volvernos todos irlandeses.

Un artículo de Ricardo Latorre para CEXT