La primer ministro del Reino Unido, Theresa May, en un reciente artículo de opinión que se ha publicado en el Daily Telegraph, ha explicado su intención de modificar la Ley de Salida de la Unión Europea y poner una fecha definitiva al Brexit. Según dice la propia Theresa May, el Brexit se producirá el 29 de marzo de 2019 a las 23 horas GMT. Su intención con este cambio en el texto de la ley es demostrar su determinación de llevar al Reino Unido fuera de la Unión Europea, a pesar de que un grupo de parlamentarios quieren parar el proceso de salida mediante su acción parlamentaria.

El debate en estos momentos en el Reino Unido es si el ejecutivo británico  tiene potestad para gobernar por decreto en un asunto como este, lo que allí se conoce como los poderes de Enrique VIII, ya que este rey fue el primero que sacó una ley sin consultar previamente al parlamento. Si el gobierno británico se sale con la suya, llevará al Reino Unido fuera de la Unión Europea incluso con la oposición de la mayoría del parlamento.

Por su parte, la Unión Europea se está cansando del paso tan lento que están llevando las negociaciones, ya que, después de seis rondas, apenas se han producido avances. El principal escollo parece estar en la incapacidad del Reino Unido para aceptar la cantidad que debe en concepto de compromisos adquiridos durante el tiempo en que ha formado parte de la Unión Europea.

El negociador europeo, Michel Barnier, ha dado dos semanas de plazo al Reino Unido para que diga si se va a hacer cargo de la deuda. Si no se produce ningún avance significativo a lo largo de estas dos semanas, amenaza con levantarse de la mesa y romper definitivamente la posibilidad de llegar a un acuerdo. Si se produce una ruptura definitiva, se avecinan tiempos revueltos para los jóvenes españoles que trabajan en Londres y otras zonas del Reino Unido.

IMAGEN: The Guardian

Un artículo de Alex de Cuenca para Cext.